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PROGRAMA

 

» Wolfgang Amadeus Mozart — Concierto para piano n.º 17 en Sol mayor, K. 453
» Anton Bruckner — Sinfonía n.º 5 en Si bemol mayor

En su trabajo conjunto por la música, la Filarmónica de Bogotá y el Auditorio León de Greiff UNAL presentan

ALON GOLDSTEIN, UN GENIO DEL PIANO

Solista: Alon Goldstein – Piano / Director: Joachim Gustafsson

40 años de cooperación por la música entre la Orquesta Filarmónica de Bogotá y el Auditorio León de Greiff UNAL

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NOTAS AL PROGRAMA
Por: CAROLINA CONTI

El 9 de junio de 1784 Mozart escribió a su padre: “Voy a buscar a Paisiello en mi carruaje, porque quiero que escuche a mi alumna y mis composiciones. Mañana iremos al campo [la casa de campo de la familia Ployer en Dobling] donde la joven Babette tocará su nuevo concierto en sol [K453] – luego yo mi quinteto – y luego los dos tocaremos mi gran Sonata para dos claves [KV 448]”. La joven Babette era su alumna Barbara von Ployer, una destacada pianista en la Viena de la época para quien el compositor austríaco ya había escrito el Concierto en Mi Bemol Mayor K. 449. De acuerdo con los fragmentos que se conservan del libro de la familia von Ployer sabemos que a ella dedicaron obras compositores como Joseph Haydn, Albrechtsberger, Joseph Weigl, Marianne Martines y el abad Maximiliano Stadler, además de Mozart.

Se sabe también que tomó lecciones de composición, como lo atestigua un cuaderno de ejercicios que Mozart creó para enseñar a la joven. Desde su matrimonio, que tuvo lugar hacia 1787, no se tiene más información sobre su actividad musical. El Concierto para piano No. 17 en Sol Mayor, K. 453 aparece en el catálogo personal de Mozart con fecha del 12 de abril de ese año, es decir tres semanas después de haber terminado el Concierto para piano en Re Mayor K 451. La obra representa un nuevo camino en la composición de las obras para piano del compositor austríaco, pero también en la historia de la forma. La técnica refinada y la elegante expresión dominan en el diálogo entre el solista y la orquesta.

El 4 de septiembre de 2024 se cumplen 200 años del natalicio del compositor austríaco Anton Bruckner, un evento que se celebra en gran parte del mundo y que la Filarmónica de Bogotá continúa conmemorando. Con este motivo, la Biblioteca Nacional de Austria ha organizado una exhaustiva muestra las diferentes facetas de la vida y la obra del compositor, un hombre en conflicto con la turbulenta sociedad de su tiempo y un innovador musical, creador de sobrecogedoras y monumentales sinfonías, así como de profundas obras religiosas. Bruckner, un hombre de provincia, aprendió música en la Abadía de San Florián cerca de Linz en la Alta Austria. Allí trabajó durante diez años antes de ser organista y maestro de capilla de la abadía. Durante ese tiempo se convirtió en un hábil improvisador al órgano y creó muchas de sus magníficas obras corales. Después consiguió el puesto de organista en Linz y durante seis años estudió composición por correspondencia con Simon Sechter, profesor en el Conservatorio de Viena. En la capital de su país se graduó del conservatorio en 1861, pero continuó su formación en Linz donde se dedicó intensamente a la composición.

El trabajo arduo y algunos contratiempos personales le desencadenaron un colapso nervioso que lo llevó a un hospital por un tiempo. En 1868, cuando tenía 44 años, se mudó a Viena donde empezó a trabajar en el conservatorio como profesor de armonía, contrapunto y órgano. Logró cierto éxito con su Misa en Fa Menor, pero no llegó a ser aceptado por la elegante sociedad de la ciudad que lo consideraba un ermitaño excéntrico. (Solo en los últimos años de su vida fue reconocido como un gran creador). Dictaba clases también en la Escuela Normal Femenina donde vivió una situación muy difícil. Fue acusado de ofender a dos alumnas, y aunque fue exonerado, las directivas de la institución lo trasladaron a una escuela solo para hombres que fue clausurada poco tiempo más tarde. La situación, además de humillante, empeoró su ya precaria situación económica.

En 1875, en medio de la dolorosa situación que enfrentaba, empezó a componer la Sinfonía No. 5 en Si Bemol Mayor. Al año siguiente estaba terminada. Sin embargo, la obra no muestra su dolor sino que es una compleja creación intelectual, de majestuosa expresión. Es la única de sus sinfonías que comienza con un movimiento lento y marca un hito en la producción sinfónica del compositor. Aquí se evidencia su maestría, no solo en el contrapunto, sino en todos los aspectos técnicos de la composición. El estilo particular del autor emerge aquí ya lejos de la influencia de Wagner, a quien idolatraba obsesivamente. Debido a problemas de salud, Bruckner no pudo asistir al estreno en Graz en 1874, que fue un desastre pues su alumno Franz Schalk, quien la dirigió, hizo cambios sustanciales en la partitura. Bruckner solo alcanzó a escucharla en un arreglo para dos pianos.


Alon Goldstein, pianista (Israel)
Es uno de los pianistas más originales y sensibles de su generación, admirado por su inteligencia musical, personalidad dinámica, visión artística y repertorio innovador. Ha tocado con la Orquesta de Filadelfia, la Sinfónica de Chicago, las sinfónicas de San Francisco, Baltimore, St. Louis, Dallas, Houston, Toronto y Vancouver, así como con la Filarmónica de Israel, la Filarmónica de Londres, la Orquesta de Los Ángeles y la Orquesta de Radio Francia. Tocó bajo la batuta de directores como Zubin Mehta, Herbert Blomstedt, Vladimir Jurowski, Rafael Frübeck de Burgos, Peter Oundjian, Yoel Levi, Yoav Talmi y Leon Fleisher.

Hace poco adelantó proyectos de grabación para el sello Naxos de todos los conciertos para piano de Mozart, con el Fine Arts Quartet. Dentro de sus publicaciones recientes se destacan dos CD en el sello Naxos: “Mozart Piano Concerti Nos. 9 y 17” con el Fine Arts Quartet (una continuación de sus dos grabaciones aclamadas por la crítica de Nos. 20 y 21 y Nos. 23 y 24) y “Scarlatti 19 Sonatas para piano”.

En temporadas recientes, Alon Goldstein actuó con la Orquesta Filarmónica de Minas Gerais, la Orquesta Filarmónica de Bogotá y la Sinfónica de Beijing. Además, tocó con Kansas City, Ann Arbor, Illinois, Spokane, Bangor, Augusta y Pensacola Symphony Orchestras, así como una interpretación del “Concierto Emperador” de Beethoven en fortepiano con Mercury Houston.

Interpretó “Age of Anxiety” de Bernstein con la Sinfónica de Jerusalén y con la Sinfónica de Xalapa, en México, para celebrar el centenario del compositor, ofreció recitales y música de cámara, incluidas giras con el Goldstein-Peled-Fiterstein Trio, el Tempest Trio y el Fine Arts Quartet en el festival Internacional Mendelssohn en Hamburgo, Alemania, así como en Cleveland, Washington, Nueva York, Burlington, Key West, Sarasota y Melbourne, entre otras ciudades.

Otros aspectos destacados recientes incluyen apariciones con la Sinfónica de Indianápolis como parte del Festival Prokofiev interpretando los “Conciertos para piano Nos. 1 y 4 del compositor, así como una gira latinoamericana de 17 conciertos con la Orquesta de Cámara de Israel que incluye conciertos en el Teatro Colón de Buenos Aires, el Teatro de Bellas Arts en la ciudad de México, el Teatro Nacional en San José y el Teatro Solís en Montevideo. También tocó con la Sinfónica de Chicago en Ravinia y en el prestigioso Festival de Piano del Ruhr, en Alemania, interpretando a Mozart, Britten y Poulenc en una noche con Leon Fleisher, su antiguo maestro, como director de orquesta.

También es un apasionado defensor de la educación musical, sus recientes compromisos docentes han incluido el Instituto Steans del Festival Ravinia, el Instituto y Festival Internacional de Teclado en Nueva York, Music@Menlo, The Gilmore Festival, Piano Texas, PYPA en Filadelfia, el Festival Internacional de Piano en Gijón, España.

Goldstein fue honrado recientemente con el premio “Society of Scholars” que le concedió su alma mater: la Universidad Johns Hopkins. Esto fue otorgado en reconocimiento a sus logros y contribuciones a lo largo de los años. Además, es el primer alumno de Peabody en recibir este premio. Se desempeña como director artístico de la escuela de verano “Lieven Piano Foundation” en Viena, así como director artístico del Mt. Angel Abbey Bach Festival en Oregon. Creó la Emerald Coast Music Alliance, cuyo festival anual en Florida está dedicado a compartir la belleza de la música clásica con comunidades marginadas, sin costo alguno.

Alon Goldstein recibió su título universitario de la Universidad de Tel Aviv, donde estudió con los maestros Victor Derevianko y Arie Vardi. Continuó su formación en el Conservatorio de Música Peabody con Leon Fleisher y fue su asistente de enseñanza. Recibió becas de la Fundación Cultural América Israel. Después de su graduación, se convirtió en “Performer Fellow” en la Guildhall School of Music and Drama de Londres, donde inició conciertos de música de cámara en los que participaron el personal institucional y estudiantes, así como un festival anual dedicado al repertorio de dúos de piano. Fue artista residente en la academia de piano “Theo Lieven” en Como, Italia.

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Notas cortesía de la Orquesta Filarmónica de Bogotá